Ella lo mira con una mirada hermosa y llena de paz. El la mira con un inmenso amor. Yo los miro muy emocionado, y a la vez muy contento de estar ahí, para ser parte de un proceso que nadie suele ver, de una trasformación donde ellos van a ser parte responsable de un producto final, digno de portar con orgullo y de compartir tan perfecta como original creación.
Se necesita llegar a 1064ºC (si, mil sesenta y cuatro grados centígrados) para lograr que el estado sólido del oro se rinda ante los pies de esa reacción química de oxidación, y toda esa gran energía llegue en parte, en forma de calor, climatizando al aire de nuestro alrededor.
Así fue como Davik (DaviK Joyas) fue la persona indicada para dicha creación, y allá fuimos a su bunker en City Bell donde la hermosa energía que había en el lugar, mas la que portaban los novios, hizo que nos olvidemos del frío que se había apoderado del día.
Entramos, la selección de oro plata y cobre -esos metales nativos- ya estaban en la balanza listos para que, explicación previa de todo el proceso, Emilia y Diego pongan manos a la obra para sus tan ansiadas alianzas de boda, en un exquisito oro rosa.
Cortadas las tiras de metales en un acto símil religioso y colocados en el crisol de fundición, Diego fue quien puso el fuego sagrado y Emi el pulso para lograr, no solo adentro del crisol sino también afuera, un perfecto equilibrio.
Ya no importaba la temperatura ni nada, solo estaban pendientes del proceso y disfrutando de una experiencia completamente nueva y que puedo asegurar, no la van a olvidar, así como tampoco voy a olvidarlo yo.
Y si bien todavía faltaba el trabajo fino y artesanal, el tener en la mano el material en crudo ya fue como ganar la copa del mundo. Las caras ya mas relajadas se llenaron de sonrisas, de miradas mas hermosas aún; y Davik, detrás, disfrutaba con ellos ese instante, que si bien para él era algo muy común, entendía que así y todo, era mágico.
Luego de un proceso mas de fundición para darle forma de bala, llegamos al fin de esta primera etapa donde respiramos un amor inmenso y una pasión absoluta por este trabajo 100% artesanal, y para que Emi y Diego, sean los portadores no solo de sus anillos, sino del amor que tanto le hace falta al mundo.
Que la felicidad los tome por sorpresa en cada esquina.
Que el amor sea eterno.
Que puedan ser ustedes mismos, en las buenas, en las malas y en las peores.
Paz & mucho amor para Uds!
Alianzas Mapamundi
Alianzas de oro Rosa con diamante corte brillante en el de ella.